Sí, es posible recibir atención médica en Estados Unidos con una visa de turista (visa B2). Esta visa permite a los extranjeros ingresar a EE. UU. por motivos de placer o para recibir tratamiento médico. Sin embargo, hay algunas consideraciones importantes:
Evidencia de Capacidad Financiera: Debes demostrar que tienes los medios financieros para cubrir los costos del tratamiento médico y tu estadía en EE. UU. Esto puede incluir seguros médicos, ingresos personales o familiares, o fondos proporcionados por organizaciones gubernamentales o no gubernamentales.
Documentación Médica: Necesitarás proporcionar un diagnóstico detallado de tu médico de origen y confirmación por escrito de los arreglos previos con un especialista o hospital en EE. UU. Esto debe incluir el tiempo y el costo estimado del tratamiento.
Visa y Estadía: La visa B2 generalmente permite una estadía de hasta 180 días, pero esto puede variar. Si necesitas una estadía más larga, puedes solicitar una extensión.
No Carga Pública: Es importante demostrar que no serás una carga pública para el gobierno de EE. UU. Esto significa que debes poder cubrir todos los costos médicos y de tu estadía sin asistencia del gobierno.
